En la esquina de Alem y Mitre hay un pozo que está cubierto de forma precaria con unas maderas. La lluvia de las últimas horas las corrió y claramente se puede observar que falta la tapa original y esto deja expuesto a todos los que circulen por allí.
Por la dimensión del pozo, tranquilamente cabe un chico, un perro o gato y puede producir una importante lesión si algún adulto llega a tropezar con él.
Por la pandemia, ABSA no está realizando las tareas de mantenimiento de tiempo completo. Los vecinos esperan que esta nota llegue a ellos antes de que en el lugar suceda una tragedia.