Los colegas de @lahuelladeportes de la ciudad de Lobos, retrataron una imagen conmovedora y ejemplificadora.
En un torneo de chicos entre 7 y 10 años, el árbitro del partido Daniel Gelvez, tuvo que parar el partido varias veces en el final porque los chiquitos de Alumni de Roque Pérez no paraban de llorar. Las lágrimas y la desesperación se apoderaron de esos niños, hasta que la contención llegó del héroe menos imaginado.
Los colegas de @lahuelladeportes, explicaron que Gelvez dirigió la final del torneo de fútbol infantil que se disputó en la cancha de Lobos Athletic Club, donde de Alumni de Roque Pérez ganaban 1 a 0 hasta que “Los Maguitos” lo dieron vuelta el resultado y se pusieron 4 a 1. Uno de los jugadores, de 8 años, se puso a llorar en pleno partido. Y el árbitro paró las acciones para abrazarlo y consolarlo.
"Yo creo que significa mucho para los chicos poder enseñarles a competir. Pero competir de buena manera. Disfrutar del fútbol", agregó en un video que grabó especialmente pata TodaPasion donde agregó que lo hizo “como padre y lo haría una y otra vez".
Aplausos y más aplausos para este hombre que les recordó a todos que solo se trataba de un juego. Desde aquí el reconocimiento para él, que honró su tarea y fue justo más allá de las tarjetas.